La 1ª jornada de Expodrónica 2016 contó con la participación con el responsable del grupo de trabajo sobre drones de la Dirección General de Movilidad y Transporte de la Comisión Europea, Koen de Vos. Durante su intervención explicó las medidas que están estudiando para la nueva regulación sobre drones, que se pretende implantar durante el próximo año.
Junto a él, Isabel Maestre, directora de AESA, ha expuesto las actuales líneas de trabajo que se están llevando a cabo en nuestro país para seguir dando impulso a la industria de los drones. A fin de crecer en concordancia con otros países de la Unión Europea, España se ha inspirado en las normativas que aplican países como Francia y Reino Unido. Teniendo en cuenta que es un sector en crecimiento, los esfuerzos se centran en superar las limitaciones de esta tecnología, a lo que Maestre asegura que “existe un gran margen de evolución”.
Además, Maestre ha destacado la importancia de tener un marco regulatorio para poder realizar operaciones seguras. Actualmente se está trabajando para que la nueva normativa, que tendrá forma de Real Decreto, pueda ser puesta en vigor lo antes posible. Para seguir las directrices de esta normativa hay que cumplir una serie de criterios a aplicar: garantizar la privacidad y los derechos de los ciudadanos, y también su seguridad. Como menciona la directora de AESA, la organización trabaja codo con codo con otros organismos internacionales para lograr un objetivo: “estar del lado de la seguridad para fortalecer el mercado”.
Planes de futuro de la Unión Europea
La futura normativa europea pretende aplicar unas directrices comunes a todos los países que, a su vez, deben adaptarse a las normas concretas para cada país. “¿Por qué crear leyes comunes europeas si ya hay normas propias de cada país? Pueden añadir bastante valor”, es la valoración que realiza el experto en drones Koen de Vos.
El director general de Movilidad y Transporte de la Comisión Europea, Koen de Vos, durante su ponencia en Expodrónica 2016.
En palabras del propio de Vos, el objetivo de esta organización es el de crear un marco regulatorio europeo que funcione “como un paraguas”, pero con aplicaciones en los diferentes países. El principal propósito es regular la actividad que desempeñe el piloto y para ello se tendrá en cuenta, por encima de todo, la autoconcienciación del mismo.
Una de las principales metas de esta nueva legislación es avanzar en los vuelos BVLOS. Con esta situación, asegura el experto, “tendremos operaciones para abrir el mercado, plataformas cada vez más demandas y con mayor rentabilidad. Y para que la UE sea competente hay que asegurar que la normativa sea flexible y proporcionadas”.
¿Cómo se hace una normativa flexible y proporcionada?
La respuesta es sencilla, pasando de un enfoque centrado en las aeronaves a uno centrado en las operaciones que se van a llevar a cabo. Las normas de aviación siempre han tenido como criterio el peso, “una aeronave más grande conlleva mayor riesgo”, explica. Pero, además de tener en cuenta este factor, también habrá que hacer atender al lugar donde se desarrolle la misión o la capacitación del piloto para la misma.
La idea es trabajar en sistemas para gestionar el tráfico aéreo (UTM) y clasificar las operaciones en categorías, dependiendo del riesgo y otra serie de factores: abiertas (misiones limitadas al VLOS), específicas y certificadas (cuando la integridad de las personas entra en juego). Esta nueva regulación aún la están debatiendo el Consejo y el Parlamento Europeo y se espera que alcancen una consenso durante el primer semestre de 2017.
Fuente: http://www.todrone.com/
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